El jueves 19 de octubre, en la iglesia de «Santa Maria delle Grazie alle Fornaci», el Card. Joâo Braz de Aviz presidió la Eucaristía en acción de gracias por los 50 años de profesión religiosa, en la Compañía de María, del P. Pier Luigi Nava, Subsecretario del Dicasterio.
Concelebraron S.E.R. Mons. José Rodríguez Carballo, OFM, recién nombrado Arzobispo Coadjutor de Mérida-Badajoz, junto con el P. Yoseph Putra Dwi Darma Watun, SMM, Superior General de la Compañía de María, y algunos sacerdotes monfortianos, los religiosos que trabajan en el Dicasterio para los Institutos de vida consagrada y las Sociedades de vida apostólica, y los religiosos trinitarios de la parroquia de «Santa Maria delle Grazie alle Fornaci». Estaban presentes los oficiales y empleados del Dicasterio para los Institutos de vida consagrada y las Sociedades de vida apostólica.
En un clima de alegría y convivencia fraterna, el P. Nava, durante la homilía, expresó su gratitud al Señor por la llamada a la vida religiosa, don de Su misericordia: «La conocida expresión - professio in manibus - la leo sobre todo como profesión en las manos de la Misericordia de Dios, manos que estrechan nuestras manos como gesto de afecto y acogida. He tocado con mis propias manos cómo mi fidelidad no es otra cosa que un don de su Misericordia».
Son numerosas las misericordias del Señor a lo largo de la vida. El Subsecretario del Dicasterio recorrió su camino hasta ahora: las amistades, las experiencias significativas, su «consagración a Jesucristo, Sabiduría Eterna y Encarnada, por las manos de María», los caminos a veces escarpados, la elección libre y liberadora de servir al Señor, la conciencia de estar custodiado por María, en su corazón de Madre. El Padre Nava se dirigió a la Virgen con afecto filial: «Espero y pido que la Santísima Virgen Reina de los Corazones siga custodiando mi nombre en su corazón».
Al término de la celebración, el Cardenal Prefecto dirigió palabras de gratitud y estima al P. Nava por su entrega y competente servicio en el Dicasterio.